El pasado mes de julio le dedicamos un artículo a las más recientes
colecciones de algunas editoriales independientes (a las que tantas alegrías debemos). Hablamos de
"Alpha Mini" de Alpha Decay, que hace poco inauguró la también nueva colección
"Héroes Modernos" con el libro colectivo
'Matar en Barcelona'; la colección
"Errantes" de El Olivo Azul, de la que este mes llegará a las librerías el tercer título:
'Maintenant' de Arthur Cravan;
"El Panteón Portátil" de Impedimenta; y la nueva serie de literatura inglesa, acostumbrados como nos tienen al gusto francés, de Cabaret Voltaire. Y no fue un caso de olvido, por el que en tantas ocasiones debemos excusarnos, dejar de citar la
nueva colección de la editorial Periférica, "Largo Recorrido", sino que se trata de la última incorporación de entre todas estas ampliaciones editoriales.
La colección "Largo Recorrido" propone desde el principio títulos absolutamente apetecibles: se inicia con el libro de Elizabeth Smart, 'En Grand Central Station me senté y lloré', al que enseguida seguirá 'Perú', del conocido editor Gordor Lish. A continuación, la información que nos ha pasado la editorial, sobre la nueva colección y el camino ya recorrido:
NUEVA COLECCIÓN
En unos días estará en todas las librerías el primer título de nuestra tercera colección (el mítico En Grand Central Station me senté y lloré, de Elizabeth Smart), y muy poco después el segundo (Perú, del conocido editor de Raymond Carver o Don DeLillo, Gordon Lish).
Esta tercera colección, llamada “Largo recorrido”, estaba ya diseñada cuando pusimos en marcha las dos anteriores, como ya le expusimos entonces a nuestros distribuidores. Y planificada para comenzar su andadura en, si se nos permite la broma, el Año Tres de Periférica, es decir, tres años después de la aparición de los primeros títulos en 2006.
“Largo recorrido” es una colección muy ambiciosa, y que debía nacer cuando la editorial ya hubiera hecho un “rodaje” suficiente, un aprendizaje riguroso y crítico. Es una colección ambiciosa porque se sustenta en una mayor apuesta económica, difícil sobre todo en tiempo de crisis, no hay que olvidarlo, y en una “lista” fabulosa de nombres de prestigio internacional de las últimas décadas que no admiten ningún tipo de discusión (fruto de los contratos conseguidos estos últimos años, muchos de ellos sustentados en el prestigio que iban ganando las otras dos colecciones entre la crítica, los libreros y los lectores). Autores cuya obra van más allá de los gustos del momento o las modas: autores tan “definitivos” en muchos casos como los que ya veníamos publicando hasta ahora, pero con una abundante obra que necesitaba una “puesta en escena” muy particular, casi creada ad hoc para ese tipo de propuestas: desde el diseño y las imágenes de las cubiertas al nombre de la colección. Una colección que se mira, con cierto aire vintage en su aspecto, en la literatura del siglo XX, en especial, pero que tiene una decidida proyección de futuro. Una colección, además, que ha de servir de relanzamiento de las dos preexistentes, y de “cabeza de puente” de otras colecciones que abrirá Periférica próximamente, trazadas también con mimo y con mucha antelación.
AHORA SOBRE LAS COLECCIONES ANTERIORES
La primera colección que abrimos llevaba por título "Biblioteca portátil", y ha superado ya los 30 títulos. Ofrece una especial atención a aquellos autores que entre la Ilustración y el fin del siglo XIX conformaron una idea de Europa y del mundo que merece la pena conocer y pensar. Y sobre la que aún queda mucho por leer. Pero también ha habido y habrá hueco en esta colección para rescatar títulos que surgieron durante el siglo XX al margen de “lo establecido” o de los gustos dominantes, y que representan lo que se ha llamado “corriente sumergida de la literatura contemporánea”. Por último, tratamos de descubrir para los lectores de España y de América Latina algunas de las propuestas más audaces y sugerentes de la última narrativa internacional, con especial atención a la mejor literatura latinoamericana Actual. De Benjamin Constant a Mary Cholmondeley, de Jules Vallès a Fialho de Almeida, pasando por Benito Pérez Galdós o Antoine de Rivarol, todos ellos ya clásicos contrastados, cuyos títulos conviven con la última literatura internacional: la de los Valérie Mréjen, Paulo José Miranda, Yuri Herrera, Gul Y. Davis, Michele Monina o Lionel tran, y con seniors de la relevancia de la rumana Ana Blandiana o del argentino Fogwill.
La segunda colección, creada en enero de 2007 y dedicada exclusivamente a publicar “no ficción” (“entre la erudición y el underground”), lleva por nombre “Pequeños tratados”, un nombre que nace de las palabras de Walter Benjamin al comienzo del Trauerspiel. Es una colección que se dedica tanto al ensayo como a la poesía o las memorias o las crónicas. Es una colección “mestiza” y plural pero que tiene muy clara cuál es su línea: la claridad y la calidad de pensamiento.En esta colección hay nombres clásicos de la relevancia de Guy de Maupassant, Rafael Barrett o Giuseppe Cesare Abba junto a ensayistas de prestigio con voz propia en nuestro presente, siempre críticos y controvertidos: Constantino Bértolo o José Emilio Burucúa, por ejemplo.
Y FIN
Una biblioteca en marcha, hemos dicho alguna vez que pretendía ser esta editorial. Era y es una humilde ambición: la de estar en muchas bibliotecas, tanto privadas como públicas, al mismo tiempo que en la memoria, en el día a día, en el mes a mes, de un número “suficiente” de lectores para mantener vivo nuestro proyecto. Desde el año Cero de la Era Periférica y, como dirían en los dibujos animados, hasta el infinito y más allá.
Gracias por vuestra complicidad y decidido apoyo.
Julián Rodríguez (dirección literaria y producción) y Paca Flores (gestión y difusión)
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