"Hay un hecho cierto: todo, absolutamente todo lo que aquí diré es enteramente culpa mía y sólo culpa mía."
Los guiños lúdicos e inteligentes de estos aforismos/pensamientos despiertan y divierten al comensal que sepa disfrutar de los pensamientos elevados, que invitan a la reflexión, producen alguna que otra carcajada y conducen a una estupenda digestión: pensar y comer en Dalí pueden parecer una sola cosa. De entre las muchas recomendaciones del chef, aparte de los erizos de mar, extraemos algunos de los platos combinados que pueden degustarse en este libro:
...ser Dalí es imposible"Cuando tenía seis años quería ser cocinera. A los siete quise ser Napoleón. Pero desde que tuve uso de razón, he comprendido que no hay ambición más alta que querer ser Dalí."
"Todas las mañanas, al despertarme, experimento este placer supremo, que hoy descubro por primera vez: el placer de ser Salvador Dalí. Y me pregunto, maravillado, qué nuevo prodigio nos deparará Salvador Dalí. Y cada día que pasa me resulta más difícil comprender cómo los otros son capaces de vivir, no siendo Gala o Salvador Dalí."
"Puedo demostrar que soy capaz de recibir cincuenta mil dólares de golpe sin
inmutarme.""No te empeñes en ser moderno: hagas lo que hagas, es lo único que desgraciadamente no podrás evitar."
"Las ideas están hechas para ser copiadas. Ideas, a mí, es lo que me sobra, y prefiero que me las roben: así me ahorran el trabajo de realizarlas."
Además de los referidos pensamientos, de una recopilación de títulos de obras de Dalí, una enumeración de pros y contras convertidos en una peculiar poética/estética (no a las mujeres, pero un sí rotundo a Gala; Dalí prefiere al Marques de Sade que a Buda, lo complejo a lo simple, los caracoles a las espinacas...) y los números del Dalí News, mi parte preferida del libro ha sido el de 'Excentricidades dalinianas'.
Cada vez me parece más interesante el Dalí escritor (autor de brillantes textos autobiográficos, ensayos...y hasta de una novela, 'Rostros ocultos'), el Dalí performer hablando y actuando en todo momento como el genio que él mismo inventó, un personaje provocativo y exagerado que aparece en cada destello de este libro misceláneo y muy recomedable. Mi opiníón sobre el Dalí pintor sigue siendo la misma (nunca me ha atraído tanto).
Vale.
[posdata: la editorial Plataforma, en su incipiente colección de Narrativa, acaba de editar también una novela de aspecto altamente apetecible: nosotros le echaremos un buen ojo, hagan utedes lo propio: 'Memento Mori' de Muriel Spark: seguiremos informando...)]
Plataforma, Salvador Dalí
Ya lo decía J.L. Godard:
¿Su obra? No me interesa una mierda su obra. Pero sus espardeñas, son oro puro, amigo. Esas espardeñas contienen entre las fibras de esparto los hongos verdaderos (y trepadores) que hacían de Daaalí el perfecto hijo de puta no-surrealista, no-amante de Daaalí, no-devorador de Gaaalas. Siempre he querido rodar una película sobre las espardeñas de Daaalí. Un musical.
Pues no parece mala cosa, mañana me paso por la librería y me lo llevo.. . . .. .... .... .